Fractura vertebral no traumática
Fracturas vertebrales por compresión, la zona en forma de tambor (cuerpo) de uno o más huesos de la espalda (vértebras) se desploma sobre sí misma y queda aplastada (comprimida) en forma de cuña. Ocurre en la zona media de la espalda o región lumbar.
Causas: Osteoporosis, traumatismo de alta energía, en un accidente de tráfico, en una caída desde gran altura, o en una herida por arma de fuego. Puede haber una lesión de la médula espinal y una fractura en más de un lugar.
Síntomas: Asintomática en un tercio de los casos, dolor leve o intenso que empeora al caminar, estar de pie o permanecer sentado durante mucho tiempo, dificultad para agacharse, alcanzar o levantar objetos y subir escaleras. La estatura se acorta y la espalda sufre cifosis o «joroba».
Diagnóstico: Radiografías o tomografía computarizada, y en ocasiones resonancia magnética.
Tratamiento: Aliviar el dolor, animar a la persona afectada a comenzar a moverse lo antes posible, permitir la funcionalidad, prevenir otras fracturas con aparatos de ortesis, medidas estabilizadoras, y vertebroplastía, inyección de cemento óseo en el hueso fracturado.